febrero 27, 2012

Cartas

No sé si ya hemos hablado del libro de Cartas, yo creo que no.

Yo creo que alguna vez me contaste una historia, que la verdad no te creí mucho.

Ahhh, eso les pasa a todos. Nadie cree que sea posible que cuando uno escoge un libro, de su autor favorito y lo abre al azar pase lo que a mí me pasa con las Cartas.

Sí, suena medio forzado. Igual para mí tu obsesión con Cortázar es un reflejo de lo intensa que sos cuando amás algo de verdad.

¿intensa? puede ser un poco pero la verdad es que...mirá mejor te muestro y ya vos decís si es que yo me lo invento ¿te parece?

Dale

**

Hoy abrí el libro, mientras esperaba que se acabara una subasta online en la que estaba participando. Hoy no estaba esperando una respuesta a alguna angustia o un consejo para seguir adelante, pero ahí estaba todo lo que necesitaba oír.

Una carta del 3 de enero de 1951 para Fredi Guthmann:

"Esta geografía inmensa que nos separa tiene un valor de símbolo, parece mostrar la otra geografía interior que también nos distancia. ¿Estuvimos realmente cerca alguna vez? Sí, por el cariño y por los gustos comunes"...

"El cariño queda, y la esperanza de algún encuentro en el futuro [...] pero de algún modo me doy cuenta de que usted no perteneció nunca a esto, que estaba siempre de paso"

"Poco le puedo contar de mí, y en realidad hasta que no reciba algunas líneas suyas me estaré preguntando si esta carta no es más una molestia para usted que otra cosa. (El pasado debería quedarse quieto, pero no quiere, se mueve, crece y vuelve; yo también recibo cartas que quisiera no recibir, cartas escritas por muertos"

Y para terminar...

"Una vez alguien se marchó para siempre de mi lado, y me dejó como despedida esta línea de Rilke: Il faut laisser seuls ceux qu'on aime. Es un buen consejo; dígame si debo seguirlo; la amistad se mantendrá del otro lado de las palabras, invariable"

No hay comentarios.: