octubre 09, 2011

Lady Di

Nuestra cita no duró mucho. Sólo era ir al hotel, recoger la maleta y volver a la casa. Todavía teníamos mucho que contarnos, pero el camino de regreso era corto, así que me limité hacer preguntas simples ¿de dónde venía? ¿qué estaba haciendo allá? y también mentí un poco, casi siempre las historias son mejores cuando tienen cierta dosis de irrealidad.

Él se había venido cuando tenía 17, más bien, un amigo suyo le había dicho a sus padres que si lo dejaban ir un fin de semana a Bogotá. Una vez instalado, con otro amigo que también huia de los reclutamientos de las FARC, empezó a trabajar en lo que saliera: lavar carros, limpiar oficinas, talleres de mecánica, mensajero. Allá le habían dicho que sería un empleaducho toda su vida, pero una vez, una señora distinguida le propuso que manejara un taxi. Sólo era uno y podría ser su propio jefe: sin horarios, sin problemas con los pagos. Empezó a ganar bien y así pudo conquistar a su esposa. Después de los primeros seis meses de vida juntos, ella estaba embarazada. Catorce años después, él siente que ella ya no lo quiere y poco le importa, sólo quiere esperar a que su hija salga de esa época donde están tan sensibles, tan solas y tan feas.

Cuando la niña nació, él estaba en una calle elegante de la Capital. Mientras llegaba, la dueña del taxi y su esposo fueron a ayudarle a la mujer del taxista. De camino al hospital escuchó que Diana de Gales había muerto en un accidente automovilístico perseguida por los paparazzis que nunca la dejaron en paz. Yo mientras tanto, con apenas 10 años, lloraba en mi cama porque se había muerto la mujer que más admiraba.El taxista llegó al hospital y cuando se encontró con los dueños del taxi le dijeron que la niña había nacido hermosa. La dueña del taxi, poniendo ese tono sabiendo dijo: la vida sí es rara, hoy nace esta pequeñita y al otro lado del mundo todos lloran porque se murió la princesa Diana.

Ya sé, lo oí cuando venía para acá, dijo el taxista. Mi hija se va llamar Lady Diana como la princesa, ella será mi princesa.


1 comentario:

JessSuarez dijo...

Hermosa narración Sara, me gustó mucho :)