Juan Pablo no sabe pero con él hice por primera y por última
vez el amor. Después de esa noche sólo he tenido sexo. No fue una noche
ridícula con velas, la música adecuada y la ropa interior perfecta, fue una
noche cualquiera en su cama y con sus amigos caminando por la casa. Él no sabe
y no tiene por qué saberlo, nunca se lo dije y ahora no es tiempo para
recordarle lo feliz que fue conmigo y que fui con él.
Sólo tengo una imagen quieta y nítida. Creo que ni siquiera
me había quitado toda la ropa, ni estaba encima de mí. Estábamos acostados y mi
cabeza colgaba de un lado de la cama. La luz del cuarto me daba en todo el
cuerpo y entonces era más blanca mi piel. Yo tenía las manos estiradas y miraba
para arriba. Sonaba Pink Floyd, siempre lo ponía para que sus amigos no me
oyeran, un día me dio rabia y le dije que prefería que me tapara la boca a que
no me dejara oírme y oírlo.
Sé que hicimos el amor, y sé que no quiero volver a hacerlo,
porque sentí una alegría distinta a la de tener un orgasmo con mi novio, algo
que muchas repetimos con distintos hombres y que pocas veces “se siente”
distinto. Los ojos los tenía ahogados y todo era suficiente: el volumen de la
música, el tiempo, la emoción, la fuerza y las ganas de no parar. Sabía que
estaba en el sitio que quería estar y con el hombre que quería estar. El fondo
era perfecto: Shine on your crazy diamond.
Después de esa noche seguimos juntos durante mucho tiempo.
Nos acostamos muchas veces, en distintas partes, con otras bandas sonoras más
“apropiadas” pero nunca volví a sentir que estuviéramos haciendo el amor. Supe
que ahí terminó esa ilusión adolescente de “hacer el amor” porque me di cuenta
de qué se trataba y no quedé con ganas de repetirlo. Desde ese día tengo sexo,
incluso lo tuve con él y es mucho mejor así.
Es un eufemismo decir “¿Lo hacemos?” ¿hacemos qué? Pregunto
yo. Uno no hace el amor, uno tiene sexo o incluso juega con el cuerpo del otro.
Tal vez sería mejor si leyéramos el Kamasutra y no sólo tratáramos de imitar
sus posiciones. En ese libro nos enseñan cosas tan importantes como que “cuando
un hombre y una mujer que se aman desde hace algún tiempo logran encontrarse
solos, superando grandes dificultades; o cuando uno de ellos regresa de viaje;
o cuando se reconcilian después de una separación causada por desavenencias, su
unión sexual se denomina la unión sexual
del amor. Se practica de acuerdo con
la fantasía de los amantes, y por el tiempo que les plazca” ¿No les parece más
bonito así?
3 comentarios:
Y a fin de cuentas ¿qué es hacer el amor?
Otra cosa, qué tema Shine on you Crazy Diamond, así "no fuera el más apropiado" :)
Puede ser...aunque a veces el cuerpo se rige por reglas distintas a las del espíritu. Hay un momento para cada cosa, como dice la Biblia e inspiró a los Byrds en "Turn", canción que no es la más apropiada para el sexo a no ser que haya muchas vueltas y revueltas ;)
Un saludo :)
Gracias por sus comentarios, a veces el hecho de que alguien me escriba me obliga a volver a leer lo que escribí.
Gracias a los dos por tomarse el tiempo para leerme.
Un abrazo
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